:::: MENU ::::
  • Descubre como lo hacemos

  • Facil de realizar

  • Expertos en Marketing.

sábado, 18 de marzo de 2017

Hace unos días mi mamá me dijo "No puedes tatuarte, porque eres una persona inmadura, es por eso que no puedes hacer lo que te haga feliz", ¿y saben? Eso me dolió.

Pero entre la tristeza que me invadía y la incertidumbre de mi persona me puse a pensar. ¿Realmente seré una persona inmadura?, yo realmente no me consideraba así, pero eso fue lo que mantuvo mi mente ocupada un buen tiempo.

Pensé mucho realmente, inclusive hice una lista de cosas maduras y otras inmaduras que hacía, y llegue a la conclusión de que yo me considero maduro, y quizás lo sea... para mí.

Pero es que este la verdad es un tema muy relativo, porque el termino varía según la persona.

Seguramente has pasado por momentos de tu vida en el que tus padres, tu novia o tus profesores te han dicho "Tienes que madurar ya y buscar un buen trabajo", "Eres un tonto Alejandro, tienes que dejar tus cosas ya" o "Si no maduras, nunca serás nada en la vida", y es que, en cualquier caso, el termino madurar no aplica, puesto que este es solo de frutas y vegetales.

Pero erróneamente la gente le dice "inmaduro" a una persona que, según ellos, siguen siendo felices y con sus proyectos en mente y buscando la manera, y no, una persona que mantiene su esencia no es un inmaduro, ellos quieren que "madures" y te conviertas en un hijo de puta que odia la vida, y eso no está bien.
Y es que hay mucha diferencia entre madurar, tomar las cosas enserio y convertirte en un hijo de puta, y en los 3 casos, la definición es relativa.

Lo que para ti puede ser un acto de madurez, para mí no, en fin, a mi criterio, madurez es aquella persona que empieza a adquirir responsabilidades, ya sea con el nacimiento de una o mil bendiciones, o teniendo un trabajo de caballo (Sí, esos trabajos donde solo miras al frente la computadora, y no tienes vistas laterales para que dejes tus ilusiones en la silla), o simplemente volviéndote más responsable en tus actividades diarias.

Una persona que empieza a tomarse las cosas en serio, es una persona que sabe lo que quiere, cuando lo quiere, y que tiene que hacer para conseguirlo, y normalmente son objetivos bien definidos y que traen algún beneficio consigo al cabo de su realización.

Y un hijo de puta, es aquella persona frustrada que piensa que por qué su vida es una basura, la de los demás tiene que ser así, es aquella persona que se alegra de la quincena, que se molesta por el éxito ajeno, y que piensa que la forma en la que él ve las cosas es la única y todo lo demás esta erróneo.
Estos fueron mis conceptos, ahora bien.

Ya dijimos que el madurar es de frutas o verduras, pero entonces ¿Cómo madurar?
Puedes tomar cualquier concepto aquí brindado e implementarlo en tu vida sí es lo que te hace feliz, o bien, puedes crear tu propio concepto, bajo tu criterio, y aplicarlo día a día.

Pero recuerda, lo importante no es "madurar", lo importante es ser feliz. Si bien, ser una persona chiflada a los 22 años no está bien, es parte de la esencia de una persona, y si a esa persona le está yendo bien así, "Fuck it", que no te moleste, carajo.

Madurar no significa perder la esencia, madurar no significa que te vas a volver una persona amargado y sin ilusiones, madurar no significa que tienes que abandonar tus proyectos para sentarte y seguir órdenes autoritarias de un sistema capitalista en dónde eres empleado (En ese caso, tú se un capitalista y no un empleado).

Madurar es saber lo que quieres, madurar es tener bien definido como obtenerlo, madurar es el equilibrio entre ser feliz con tus acciones y encontrar​ la manera de otorgar algún beneficio a la sociedad con esto.

No es necesario perder tu esencia si quieres madurar, no cambies por alguien más, cambia por ti mismo.



0 comentarios:

Publicar un comentario

¿Te interesa? Contáctanos